viernes, 31 de enero de 2014
DÍA 5 - ACTIVIDAD: Ensayo.
Importancia de la lectura y la escritura en la Universidad
¿Útiles
en disciplinas creativas y de diseño?
Heidi
Lizbeth Monroy Carranza[1]
Facultad de Arquitectura
hmonroy@uv.mx
Resumen
De inicio, se plantea el dilema del lápiz, instrumento básico de expresión
que retoma el hábito de la escritura, la cual, se ha venido limitando a una
producción masiva pero alejada del ser, y por otro lado, la lectura parecería
adquirir un marco horizontal de pantalla, en donde el mundo sintético parecería
operar por referencias superficiales y no desde reflexiones profundas, es por
ello que se plantea una estrategia para incorporar la lectoescritura al proceso
de diseño, esto consistiría en una exploración mediante la propuesta estética
del estridentismo, la cual, podría ser una posibilidad para enlazar la palabra
escrita con una propuesta gráfica que la incorpore y complemente en tanto
expresión. Esta posibilidad podría ser congruente con el escenario que plantea
el contexto petrolero de Poza Rica.
Palabras clave: Diseño, lectoescritura.
“… el orden
del diseño propicia la libertad.”
Teodoro
González de León
Arquitecto
mexicano
El dilema del lápiz
No importa cuánto avance la tecnología, el lápiz ha tenido un lugar asegurado en la historia, así, desde el espontáneo croquis, instrucciones, palabras, todo preámbulo de algo a diseñar tiene por nacimiento el contacto entre el papel y la rugosa superficie del grafito. El presente escrito aborda la importancia tanto de la escritura como de la lectura en disciplinas creativas. Se ha propuesto comenzar con uno de los objetos que durante siglos han conectado el mundo ideal y el material: el lápiz; pues finalmente, se ha dado en afirmar que se piensa mejor sobre una hoja de papel (Warburton, 2012: 47).
El presente documento se encuentra estructurado por el abordaje de la escritura, seguido del impacto de la cultura digital en los procesos de lectura; posteriormente, se toma un movimiento artístico referente, en este caso, el estridentismo como una posibilidad de enlazar de forma integral la lectoescritura con el diseño.
La escritura más allá de un hábito
En las culturas orientales, el uso de la espada y la
escritura van profundamente ligadas en cuanto a identificarse como ejercicios
obligatorios de todo caballero samurai, pues ejercitar el brazo ayudaría a
incrementar la fuerza y los reflejos de la mente, mientras que la habilidad de
la mano ayudaría a sensibilizar y conectarse con el corazón. Esto que pareciera
ser un complemento es toda búsqueda de progreso, pues se trata de optimizar bajo
un criterio integral que contribuyera al desarrollo del ser y estar en el
mundo. Dentro de esta referencia, no se habla del legionario romano sino de un
guerrero que en su quehacer práctico fuera implacable, mientras que en sus
ratos de contemplación pudiera valorar el entorno y conectar así su espíritu.
En analogía a este guerrero, la dimensión del
diseñador sugiere fuerte disciplina en cuanto a disponer de la creatividad para
ofrecer respuestas rápidas ante cualquier problema que se presente, pero al
mismo tiempo, lograr la identificación y conexión con el tema a desarrollar a
fin de comunicar y compartir lo que detecta. Usar el lápiz implica ese
quehacer, en un principio no importa si se dibuja mal al inicio, el constante
ejercicio de boceto y diseño, al mismo tiempo que una sensibilización del
contexto, hacen que el diseñador logre encontrar su lugar en su espacio y
tiempo.
Se expresa, propone, se desahoga en ocasiones, pero
con el tiempo, su trazo se vuelve único y se apuesta a que con la práctica
encuentre su lenguaje propio y particular, el cual, trasciende al ejercicio del
dibujo, pues lo que se manifiesta en bocetos terminan materializándose en la
realidad, en diseños encauzados hacia el contexto con el que el diseñador se ha
identificado; bajo esta mirada, el diseño ya no se limita a un solo campo, sino
que los perfiles profesionales van
ampliándose cada vez más y las fronteras tienden a difuminarse como en todo
principio multidisciplinario. Éste es el escenario deseable para todo joven
diseñador.
La preocupación a este respecto, estriba en que las
referencias que van tomando hoy en día, se fincan en la traducción del dato
hacia una infografía o una gráfica sintetizadora, de la idea a la computadora
sin pasar por el lápiz; se empieza a observar el alejamiento del boceto y la
rotulación a mano, “no soy bueno dibujando” es una excusa indefendible para
cualquier persona inscrita en una disciplina de diseño.
¿Para qué escribir si ya lo hace la computadora?
Efectivamente, creativos como Steve Jobs, fundador de Apple, ampliaron las
fronteras de la programación de software vía el diseño, y así, se empezaron a
difundir una variedad de tipografías e íconos que harían ver posibilidades más
allá de las ofrecidas por los golpes de la máquina de escribir; por tanto, el
ejercicio de la escritura se ha venido limitando cada vez más a hacer uso de
los productos ofrecidos, así que ya no tiene sentido escribir, si se le puede
ir dictando directamente a la computadora, menos aún, hacerlo a mano si ya se cuentan
con tipografías adecuadas.
El extremo del homo-videns
Esta caracterización sugerida por Giovanni Sartori,
muestra una versión del ser humano cuya atención está regida en mayor medida
por el sentido de la visión, y por tanto, el mundo casi se muestra a través de
una pantalla. Esto se confirma en los medios electrónicos sustituyendo
paulatinamente la hoja impresa, del mismo modo, los hábitos de consumo van
caracterizándose de virtualidad. En la sesión de hoy, el Mtro. Jesús Martell
compartía una interesante reflexión:
“… tal vez soy pesimista, creo que somos hijos de nuestra época, y todo
debe seguir permaneciendo en todo tiempo y espacio, coincido en que muchas
veces no queremos entrarle a las tecnologías. Somos una generación donde
nuestros padres leían. Somos una generación de transición y hemos de transmitir
el gusto por leer, aunque sea doloroso porque nos cuesta transmitir y
trabajarlo con las nuevas generaciones…” (Martell, 2014)
La Dra. Alba González, refiriendo en la sesión a
Zermeño, habló de la diferencia entre la generación analógica y la generación
digital (González, 2014), así que concatenando ideas, los profesores entre los
35 y 40 años aún heredamos la percepción de la generación analógica, y en
franca transición a la cultura digital, detectamos como problema una situación
que las nuevas generaciones no perciben. Al decir de todo terapeuta, el primer
paso es darse cuenta que se tiene un problema, más complejo aún preguntarse lo
que ocurre ocurre con los jóvenes diseñadores que están entendidos de tener un
problema que no reconocen. Exponentes de Homo-Videns que miran hacia afuera y
reciben los estímulos del mundo, pero que han perdido el contacto de conexión
desencadenante del diseño.
Retomando los
contenidos:
- La escritura se ha venido limitando a una producción masiva pero
alejada del ser.
- La lectura parece adquirir un marco horizontal de pantalla y el
mundo sintético opera por referencias y no reflexiones profundas.
Estrategias para incorporar la
lectoescritura al proceso de diseño
Es pertinente buscar un enlace para tratar de
incorporar el hábito de la lectoescritura como uno de los requerimientos
básicos para diseñar, por lo cual, una opción para lograrlo pudiera ser un
movimiento artístico de referencia que haya manejado un criterio de
integralidad e interdisciplinariedad.
Es por ello que en la búsqueda de un referente, se
hace referencia al Movimiento Estridentista, el cual, fue un movimiento
artístico interdisciplinario que surgió en Xalapa en la segunda década del
siglo XX con el impulso del esteta Manuel Maples Arce[2], este
movimiento implicó propuestas creativas en el ámbito editorial, cultural y
educativo, consistió básicamente en las expresiones eclécticas de la cultura
popular y de masas bajo la influencia de vanguardias de la época, tales como el
futurismo, el cubismo y el dadaísmo. Cabe mencionar el auspicio institucional a
través de la fundación de la Universidad Veracruzana con el apoyo del entonces
gobernador del Estado de Veracruz, Heriberto Jara.
Las producciones de este movimiento se caracterizaron
por la denuncia y la propuesta desde las parcelas de diferentes campos, la
poesía y la narrativa se integraron discursivamente en grabados, pinturas,
instalaciones y esculturas.
La propuesta estridente digital
¿Qué pasaría si se emprendiera el análisis y la
propuesta de una versión digital del estridentismo? El contexto petrolero de
Poza Rica, hoy en día plantea un escenario, aquél donde el silencio se cierne
como velo de asfalto sobre los problemas que amenazan con integrarse a lo
cotidiano: la violencia, los problemas urbanos, la contaminación, los enfermos
mentales deambulando por la ciudad, entre otros.
En contraste, los medios digitales se han convertido
en válvulas de escape, donde temas como el de los chicos manifestando su amor
en los puentes, ocupan espacios de opinión y de agenda colectiva. ¿Qué pasa con
la identificación de lo esencial? ¿Qué pasa con el papel tradicional del
diseñador como creador de soluciones?
Así, rescatar los postulados del estridentismo habrían
de posibilitar nuevas búsquedas y reflexiones, sobre todo cimbrar al joven
diseñador para que a través de la lectura y la escritura integradas en
ejercicios de diseño, sea encaminado metodológicamente y así, posibilitar su
expresión de manera integral, es una posibilidad, ¿sería un riesgo?… entonces, ¿por
qué no apostar por una exploración de esta naturaleza? Teodoro González de
León, destacado arquitecto mexicano y escritor, invita a concebir el orden del
diseño como un factor que propicie la libertad.
Referencias
Hernández Ruiz, Rubén. (2008) Andamiaje
para escribir un ensayo OP para los cursos-taller Habilidades del
Pensamiento Crítico y Creativo y Lectura y Redacción a Través del análisis
del Mundo Contemporáneo, AFBG, UV. Revisión: 2011/2013. Xalapa, Ver. México.
Genial, Servicios Educativos.
González, Alba y Martell, Jesús. (2014) Sesión 5. Versión estenográfica. Texto paralelo de andamiaje
redactado por Heidi Monroy durante el taller de "Lectura y escritura:
Contextualización e integración de saberes". Universidad Veracruzana.
Unidad de Servicios Bibliográficos e Informáticos de Poza Rica,
Ver.
Sartori, Giovanni. (1998) Homo
videns: La sociedad teledirigida. Editorial Taurus. Santillana.
Warburton, Nigel. (2012) Cómo
aprender a escribir. Febrero de 2012. Editorial Paidós. ISBN:
978-84-493-2680-6
|
[1] Heidi Lizbeth Monroy Carranza (2013).
Actividad del día viernes: Escribir un ensayo. "Lectura y escritura:
Contextualización e integración de saberes". Universidad Veracruzana.
Unidad de Servicios Bibliográficos e Informáticos de Poza Rica,
Ver.
[2] A dicho movimiento se sumaron Arqueles Vega, Germán List Arzubide,
Salvador Gallardo, Germán Cueto, Fernando Leal, Fermín Revueltas, Ramón Alva de
la Canal, Luis Quintanilla y Leopoldo Méndez.
DÍA 5: Pausa para la Reflexión y Autoevaluación [PRA-5]
Fue increíble, tiempo para pausa, teníamos la idea latente de compartir zacahuilt con los compañeros y el profesor, me sorprendió la rapidez y la capacidad de organización de mi compañera, la Dra. Nimbe Vargas.
- Entonces, ¿zacahuilt? ¿como quedamos?
¡Va! Apenas estaban por salir los compañeros en pos de algún café, antes de regresar a redactar el ensayo.
Listado, monedas. La coordinadora convidaría un sabroso rollo un poco más tarde, así que de momento salimos en pos de los paquetes.
El zacahuilt es, a ojos externos, un tamal muy grande cocido en un hoyo en la tierra, del cual, se va sirviendo en porciones individuales, no falta esa enorme cuchara de peltre que parece hundirse en la deliciosa masa martajada con una mezcla de chile ancho, chile guajillo, chile pasilla, cebolla asada, manteca y demás ingredientes, sale la cuchara con ese "tanto" hasta ir formando un paquete individual en un trozo de hoja de plátano, por lo general, de 3 a 4 cucharadas coronadas por hebras de carne de cerdo y chiles en vinagre, una vez servido, se envuelve cuidadosamente y a manera de cubierta, una hoja de papel estrasa.
Así, apilados rápidamente, se formaron los paquetes previstos, agregaron en una bolsa anexa, charolas de unisel, cucharas y servilletas.
Rápidamente retornamos, el tiempo alcanzó para distribuir el desayuno, degustarlo, platicar, bromear un rato, recibir con agrado el delicioso rollo de piña, brindar esa última sesión entre risas nerviosas con los compañeros y escuchar la alerta de los relojes, ¡hora de regresar a redactar el ensayo!
No se compara esa actitud de renuevo, de alegría y al mismo tiempo, de entusiasmo y curiosidad, ¿qué escribirán mis compañeros?
- Entonces, ¿zacahuilt? ¿como quedamos?
¡Va! Apenas estaban por salir los compañeros en pos de algún café, antes de regresar a redactar el ensayo.
Listado, monedas. La coordinadora convidaría un sabroso rollo un poco más tarde, así que de momento salimos en pos de los paquetes.
El zacahuilt es, a ojos externos, un tamal muy grande cocido en un hoyo en la tierra, del cual, se va sirviendo en porciones individuales, no falta esa enorme cuchara de peltre que parece hundirse en la deliciosa masa martajada con una mezcla de chile ancho, chile guajillo, chile pasilla, cebolla asada, manteca y demás ingredientes, sale la cuchara con ese "tanto" hasta ir formando un paquete individual en un trozo de hoja de plátano, por lo general, de 3 a 4 cucharadas coronadas por hebras de carne de cerdo y chiles en vinagre, una vez servido, se envuelve cuidadosamente y a manera de cubierta, una hoja de papel estrasa.
Así, apilados rápidamente, se formaron los paquetes previstos, agregaron en una bolsa anexa, charolas de unisel, cucharas y servilletas.
Rápidamente retornamos, el tiempo alcanzó para distribuir el desayuno, degustarlo, platicar, bromear un rato, recibir con agrado el delicioso rollo de piña, brindar esa última sesión entre risas nerviosas con los compañeros y escuchar la alerta de los relojes, ¡hora de regresar a redactar el ensayo!
No se compara esa actitud de renuevo, de alegría y al mismo tiempo, de entusiasmo y curiosidad, ¿qué escribirán mis compañeros?
DÍA 5 - [TPA] Texto Paralelo de Andamiaje (Estenográfica del viernes 31 de enero de 2014)
RUBÉN HERNÁNDEZ: Llego contento, pero con un poco así de
“ay, ya se va a acabar esto”.
SOFÍA NOCHEBUENA: “un poco así”, ¿cómo?
RUBÉN HERNÁNDEZ: Mezcla de nostalgia porque vine, nostalgia
porque me voy. Ayer conversando con una maestra, le decía, “quiero participar
con ustedes en un cuerpo colegiado”. Así que hay una puerta abierta a regresar,
y eso me emociona. Me siento apurado, hay cosas que ver. Espero que nos alcance
el tiempo. Quisiera ver producciones. Veamos, capítulo 5. Incursión al estilo. “Cómo
escribir textos académicos”.
(LECTURA DEL TEXTO)
Este libro trata de escribir mucho pero…
SOFÍA NOCHEBUENA: Lo veo con este curso. Tengo problemas con
la ortografía, ahorita no me he preocupado tanto por eso sino porque fluyan mis
ideas.
HEIDI MONROY: Es la importancia de fomentar el hábito de la
escritura.
ALBA GONZÁLEZ: A quienes estamos obligados a entregar una
cierta cantidad de publicaciones, entonces, ya no te fijas la calidad del escrito,
sino ya, ¡órale! Hay que cumplir.
RUBÉN HERNÁNDEZ: Recomienda levantarse, un par de horas
escribir, y al día siguiente también, así que va produciendo. Cuando he
decidido escribir así, al principio será una cuartilla, será uno, dos o tres.
Esto de escribir en un horario, funciona. Pero como dice el capítulo, una cosa
es producir, otra es producir bien. La intención es estar pendiente de lo que
hay aquí. Aquí hay otro pedacito. Dice ‘Diagnosticar el problema’...
(LECTURA DEL TEXTO)
Hay que revisar el modelo mental de escritura académica, que
suenen más a usted, que me reflejen, que cuando me lean, me identifiquen.
(LECTURA DEL TEXTO EMPRENDIDA POR LOS ASISTENTES)
RUBÉN HERNÁNDEZ: Tendrá que ver el cómo lo leo. Y va en
relación. En un momento, cambiábamos las palabras porque algo nos decía que
construía una oración. Esas notas no las quise hacer en el momento. Esto me
lleva a la metalectura. O de plano me brinco y quién sabe qué dijo, pero cuando
lo hacemos de manera abierta, vamos a hacer las pausas como para que se
comprenda. Vamos a dejar eso ahí, y vamos a regresar al ensayo. Tienen otro
estilo.
HEIDI MONROY: (Sin registro)
JESÚS MARTELL: Bueno, hay que saber dónde está uno parado
dónde escribe, las palabras no son neutras, representan convicciones… de hecho,
hay críticos que cuestionan el APA, tenemos un estilo de convención de cómo
presentar reportes, hay que saber en dónde uno anda, buscando negociaciones. “Bueno,
ahora nos quedamos con ésta”. Tampoco la palabra es pasarla de uno a otro. En cada
uno, detrás hay un espacio de formación.
ALBA GONZÁLEZ: Y creo que también cabe ser humilde, el
reconocer que uno no sabe todo, uno no sabe todos los conceptos; la otra cosa,
nos obliga a investigar más, en este sentido, qué voy a decir, cómo lo voy a
decir, no es lo mismo sustentabilidad que sostenibilidad (mantenerlo a largo
plazo). La especialización nos obliga a controlar una parcela del conocimiento,
insisto que en Poza Rica es necesario dialogar entre nosotros sin afán de que
las ciencias duras dominen sobre otras.
RUBÉN HERNÁNDEZ: “Es que los profesores no leen”. Habemos
profesores que no existen, el ‘habemos’ no existe. Ésas son las dudas que resuelve
un libro como éste. “Guía esencial”. Y acá en Ramoneda, hay otro que me
encanta. A ver, ‘in strictu sensus’; en
términos de didáctica. La escuela primero nos da el detalle, eso que
escribimos, pareciera que lo llevamos al contexto. Aquí primero contextualizamos,
ideas susceptibles de escribirse, cualquier situación puede ser adecuada, pero
ahora me voy a la revisión. La gramática
te la cambian, y ahí se empiezan a crear los miedos al escribir bien. Entonces,
al revés, podemos hablar de esto, de esto, bien, puedes escribirlo, y puedes
pulir. Podemos referirnos y saber su significado. ‘A priori’, es una locución y
no nos damos cuenta. Hubo cuestiones de ¿por ahí qué está diciendo? A ver,
déjame verlo. Utiliza itálicas, visto, ya está empleando otro sentido, y la
comprensión empieza a amplificarse. Y es
esa sensación de preferir el libro.
ESTEFANY GÓMEZ: Sentí que cuando leí, fue como un
trabalenguas. Pero no le entendí.
SOFÍA NOCHEBUENA: En ocasiones leía y no me entendía; a
veces pasa, lo leían y no escuchaban.
RUBÉN HERNÁNDEZ: Me pongo y me quito los lentes, distingo
quién está hablando, se trata de asociar otros sentidos para tratar de
ubicarse. Vayan pasando la idea, si leo con pausas, apoyándome en signos de
puntuación. La otra. Entra la parte editorial, la longitud del texto, tamaño de
las letras, si tiene patines. Vamos a leer.
(LECTURA: “Para la tribu” de Sabina Berman)
NIMBE: De la forma de leer y si no respeto los signos, no lo
voy a entender.
LUIS NAVARRO: Destaco las comas, la puntuación, lo que hemos
estado mirando, escribir ideas cortas y contundentes. Y, desde el punto de
vista del autor. La ventaja que tiene escribir para uno, puede resultar incluso
polémico, cuestionable, pero es esa versión del tema que estoy abordando,
aunque diga que no, pues se está adaptando a las reglas de la tribu.
RUBÉN HERNÁNDEZ: Son las reglas de la comunidad las de la
tribu. ¿Lo puedo considerar como ensayo académico?
ALBA GONZÁLEZ: Sí, porque está entrando en la literatura con
figuras narrativas importantes. No utiliza la metáfora y termina con lo que no
quiere usar. Entre metáforas, van y vienen en el tiempo, pero se regodea en el
relato. Entonces, lo tomaría como un ensayo académico. La otra, es un excelente
ejemplo, si uno quiere empezar a escribir. Escribir sencillo, la misma práctica
te dará la oportunidad de ingresar más conceptos.
RUBÉN HERNÁNDEZ: Definitivamente. Escritora, dramaturga y
ensayista, ya lo decía Silvia, metas, horario y escribe. Aquí hay otro.
ALBA GONZÁLEZ: Una de las cosas que es necesario remarcar
para este asunto de la escritora, reconocer que no hay escritura perfecta. De
repente nos da pena que nos digan, están criticando el escrito, no la persona,
porque si uno se engancha, de por sí la autoestima, es un buen pretexto,
entonces, cuando empecé a escribir, y me encontré con estos críticos severos.
Me sentía muy mal, precisamente, mi psicóloga tuvo que decirme, no te están
criticando a ti, sino a tu escrito. Tendrás que corregir eso que te están
diciendo. Es el consejo que doy, sí exponernos, pero ser humildes, sí, es
perfectible y voy a corregirlo.
LUIS NAVARRO: En el otro extremo, tengo serias deficiencias,
soy el mejor y tengo alguien que me dijo “qué bonito”, cuando enseño el texto,
me dice “no sirve”. Entonces quiere decir, mi mamá a lo mejor, no estaba
suficientemente informada para analizar mi texto. Tampoco me lo voy a creer
mucho. En periodismo se dice algo bien interesante, ¿tu mamá te quiere? Sí,
porque mi mamá dijo que estaba bien, pero la maestra dijo no. Como un amigo mío
que ganó un concurso de maestros de primaria, no quiero ser cruel. Creo que es
importante, la humildad tiene que ver eso, la perfección no existe, estamos
para mejorar, si no eres humilde pues no aprendes.
RUBÉN HERNÁNDEZ: Es más de cómo lo ves, ¿qué significa para
ti un éxito? La fama. Eso viene desde la escuela de la estrellita en la frente,
y pues uno se acostumbra. Al terminar el bachillerato, y está lo mejor de
Xalapa, lo mejor de Córdoba, en fin, la competencia. Recuerdo mis compañeros me
preguntaban, mira, a lo mejor estudio media hora más que tú. Dedicamos al
hábito de lectura.
(LECTURA. El pintor de la vida privada. Agustín Cadena.)
IDALIA LUCERO: Es un pretexto para el texto, motivo para
leerlo. Debe tener todas las pausas, la introducción y el punto final, para un
público al cual dediquemos.
ALBA GONZÁLEZ: ¿Está analizando? ¿Está argumentando? Este
ejercicio está muy bien, muy entretenido y accesible.
JESÚS MARTELL: Escribir de manera sencilla, no es tan
sencillo. Las comas, los puntos no es porque los puso ahí, sí se preocupó de
comunicar lo que quería con su ironía, humor, va más allá de lo técnico, creo
que el mensaje es usar estos recursos porque quiero comunicar esto. No usarlos
por cumplir con la forma.
RUBÉN: Es la parte de déjate fluir.
LAURA GAYOSSO: Importante, de una forma tan fluida y jocosa.
RUBÉN HERNÁNDEZ: 2 cosas, para los que nos dedicamos a la
educación, ahí tenemos una buena rúbrica. Si tienes esto, ¡tás!, si tienes
esto, ¡tás!. Es que las rúbricas son difíciles, bueno, hasta el chisme puedes
evaluar. Ya me enganchó, quiero seguir leyendo ese texto. Si pregunto si es un
texto académico, si me entrega un ensayo, porque además de contenido
estructurado, tiene estilo, alegría, alegoría incluso.
IDALIA LUCERO: Me recuerdo, he impartido la experiencia de
estadística, ¡ay! Vamos a llevar estadística, todos tienen compromisos para no
llegar, todos caen con el punto numérico, hay que tratar de convencerlo,
estadística tiene otras cosas, les comento que cuando estaba en Xalapa, trabajé
en un laboratorio de asesoría estadística, estábamos en el café, hablando de
política, acabábamos de hacer sondeos de candidatos a presidente municipal,
igual el censo de mercado que estaba haciendo TAMSA, una de ellas decía, “esta
bola de viejas chismosas, ni se imaginan que lo van a saber dentro de un mes”
(RISAS) así platicábamos, mi papá decía, “y qué hiciste”, le comentaba lo que
realizaba, es que tú eres una chismosa, es que nosotros los de estadística,
somos chismosos, sólo que tenemos que presentar el chisme en forma de reporte,
el cual, es un modelo inri, tiene introducción, metodología, resultados y tu
conclusión o aportación. La introducción, ¿nos queremos enterar de este
chisme?, la metodología, resultados, la gente opina sobre ti, la gente quisiera
que usaras esto, y en el resultado, “creo que a ti te funcionaría esto”. Nos
enteramos de los chismes de otros. Trato de convencer a mis alumnos de que
hagan estadística.
TEXTO: JIMÉNEZ CAMILO
LUIS NAVARRO: Veo a mis hijos, ahora en la secundaria no
quiere saber de textos, ahora con los chicos universitarios, no es cuestión de
casa, soy hijos de albañiles tuve que vivir cosas duras; esto que pasa, todavía
no me derroto. Algo pasa del kínder a la universidad, los chicos llegan como
zombis. Es increíble. También de plano ver Capote en lugar de ‘A sangre fría’.
Texto de No Ficción de la historia del periodismo, de plano, vean la película.
LAURA GAYOSSO: Aunado a lo que el maestro comenta, mi hijo
está en la secundaria, hay un abismo fenomenal entre lo que fue mi educación,
mis lecturas. Ahora son extractos y no hay ese hábito de lectura en la
primaria. Mi esposo y yo con mi hijo, intentamos que leyera textos diferentes.
Sucede una cosa, la desmotivación que hay con los maestros. Un caso específico,
mi hijo estuvo leyendo un texto sobre migración sobre migración, cómo Japón se
levantó. En un comentario en su casa, me dijo ‘tuve un problema en la escuela,
ella (la maestra) me decía que migran porque quieren oportunidades. Expliqué pero
dijo que nos dedicáramos a lo que dice el párrafo’. (MUESTRAS DE INDIGNACIÓN EN
EL GRUPO) Como ven, les van cortando. Tiene razón, los chicos están
desvinculados. Aquí hay un gran trabajo. Cosas que quizás físicamente cambien
el panorama de tu forma de pensar.
ALBA GONZÁLEZ: Como decía Zermeño, sí había una separación
de mirada del mundo de quienes nacimos en los analógicos, cámaras con luz,
frente a los instrumentos digitales, eso iba conformando una forma de percibir
la vida. Aquéllos que éramos analógicos, reteníamos más en la conciencia. Los
digitales no recuerdan por la cantidad de información generada. Eso viene con
este problema de generación y se vive en todos los países, ¿qué hacer los que
estamos en el aula? ¿qué hacer? Me he puesto a pensar lo que han opinado mis
compañeros. ¿Cuál es la práctica que debemos seguir para jalarlos a una mínima
lectura? ¿Cómo es que los estudiantes
que vienen de comunidades, los chicos de ciudades también se enfrentan a la
apatía de la lectura. ¿Qué podemos hacer para escribir?
RUBÉN: Ese ‘qué podemos hacer’ es la solución escrita.
Plantear una expectativa de cómo llevar al cabo.
JESÚS MARTELL: Retomando. Hace rato veían una imagen, una
persona “qué loco al mismo tiempo que escribe, imprime” (RISAS EN EL AULA). Tal
vez soy pesimista, creo que somos hijos de nuestra época, debe seguir
permaneciendo en todo tiempo y espacio, coincido, muchas veces no queremos
entrarle mucho a las tecnologías. Los jóvenes no le quieren entrar mucho. Somos
una generación donde nuestros padres leían. Somos una generación de transición,
transmitir el gusto por leer, aunque sea doloroso. Nos cuesta transmitir y
trabajarlo con las nuevas generaciones. Prácticas de cómo enseñar, y
finalmente, redescubrirnos, redescubrir, creo que las generaciones analógicas
podemos aportar a los jóvenes, no me considero digital, acercarnos a los
códigos de ellos.
RUBÉN HERNÁNDEZ: Como lo decía Silvia, en cantidad podemos
decir muchas cosas. No sólo lo que escribimos, sino cómo lo escribimos. Que
escribimos y qué escribimos. ¿Y cómo lo hicimos?. La siguiente actividad es
propuesta, consiste en sentarse a escribir. Ayer se pidió que trajeran, o el
documento que está más atrasado o aquél que está tan avanzado. La pregunta es
¿cuál?
(REACCIONES DE BÚSQUEDA EN LA SALA)
A mí se me ocurría que escribieran algo, lo compartieran y
lo retroalimentaran. Apelando a esta idea, en el otro lo que no logro ver,
cuando lleguen a un lector fresco, “ah mira, lo que quieres decir con esto”. Y
en el diálogo mejorar.
***
Se abrió el evento en Facebook, para incorporar fotografías.
También se abrió un grupo privado para compartir la
evaluación del curso y la autoevaluación del desempeño (como el Diario de Vida
y Aprendizaje, así como el recapitulador – DVR –).
***
***
jueves, 30 de enero de 2014
DÍA 4 - ACTIVIDAD: Artículo de divulgación
Arquitectura rima con ‘lectoescritura’
Por: Heidi Lizbeth Monroy Carranza
Dibujar ¿pretexto para no escribir?
La preocupación por los arquitectos que no escriben, es una
constante que parece adquirir una mayor dimensión, pues los contenidos
virtuales parecieran abrir un abismo entre el estudiante de arquitectura y el
texto sin imágenes. En arquitectura se habla de conceptos y expresión, pero las
experiencias educativas consideradas en la formación del arquitecto, incluyen
el desarrollo de habilidades a través de la observación, diagnóstico y dibujo,
por lo tanto, la expresión se manifiesta en modalidades referidas a manera de
croquis, bocetos, sketches y bosquejos. En el recuento de la tradición, se
tiende a apreciar la palabra escrita como un procedimiento arcaico ya superado,
recordando pues, la tradición de la rotulación que, al parecer, se ha heredado
a los diseñadores gráficos; se trae a la memoria el uso de plantillas, regletas
y demás instrumentos para reproducir “letras” y así, disponer de la información
escrita en el plano del proyecto arquitectónico, como datos técnicos,
especificaciones, descripciones y recomendaciones.
Los recursos tecnológicos hacen abreviar el tiempo de
elaboración, de modo tal, que lo que parecía ser un procedimiento artesanal se
ha sintetizado en la velocidad de escribir sobre el teclado, y así, se emprende
una redacción descriptiva en torno al proyecto arquitectónico plasmado en una
pantalla; con esto, la preponderancia del dibujo parecería excusar la falta de
escritura bajo otras modalidades, y por tanto, la lectura se convierte en un
quehacer visual que favorecería la apreciación de la forma en cómo se presenta
el contenido, mas no del contenido en sí cuando éste se presenta en texto
escrito sin un formato atractivo.
La lectoescritura es un proceso mediante el cual, tanto la
lectura como la escritura, conforman actividades que desencadenan un proceso
integral de metacognición en las etapas formativas, así que se da por hecho que
se cumple en las asignaturas teóricas y metodológicas, sin embargo, se observa
en la fase de elaboración de monografías o tesis, cierta resistencia a una
redacción analítica, del mismo modo que se siguen observando faltas de
ortografía, sintaxis objetables así como redacciones de ‘copia y pega’ sin
consignar las citas correspondientes.
Con antelación, tuve oportunidad de analizar las modalidades
de textos alternativos útiles para adaptarlos a procesos de generación y
presentación del proyecto arquitectónico, por lo cual, someto a revisión lo
anteriormente expuesto a fin de depurar las posibles estrategias a aplicar en
este ciclo escolar.
A tu aventura ponle pintura, a la arquitectura, ¡lectoescritura!
En una reciente sesión con los aprendientes de la
experiencia educativa denominada, “Teoría: Iniciación a la Arquitectura”,
reflexionábamos en voz alta acerca de las habilidades detectadas en paralelo a
la formación, y ciertamente, se ha desarrollado cierta sensibilidad a la música
en tanto recurso para permanecer alerta cuando se elaboran dibujos o maquetas.
¿Qué pasaría si se aplicara esa habilidad a fin de detectar el ritmo de la voz
del autor? Durante esa sesión se abordaron los temas de los acentos en el habla
cotidiana, así como esos sellos característicos en la pronunciación de
cantantes o artistas al momento de interpretar sus canciones.
La actitud pareció cambiar, pues para los ojos de estas
nuevas generaciones, acostumbrados a la velocidad de 48 cuadros por segundo sin
marearse (como el caso de la película “El Hobbit” dirigida por Peter Jackson),
poner enfrente un texto estático sin imágenes o composición visual, no produce
rechazo por incapacidad, sino porque no hay motivo para emprender una lectura
que ya se le juzga de aburrida aún sin leer la primera línea.
No considero que el regaño, la etiqueta afiliada a la
‘incultura’ o las orejas de burro, sean estrategias atinadas para motivar la lectoescritura,
es más, toda crítica contemporánea que juzga a quienes no leen debería
detenerse un instante, pues hay ojos que si bien, no posan su atención en el
contenido de una frase escrita, debería reconocérsele el mérito de no marearse
ante el contenido lúdico que se exhibe en pantallas de todos los tamaños.
Con las sesiones que hemos tenido con los aprendientes, también
se observa una sensibilidad al sentido del oído, incluso alguien dijo, “si ese autor
está en audiolibro, ¡mejor!”, así que una estrategia para motivar la lectura
habrá de consistir en detectar los ritmos y recobrar el hábito de la lectura en
voz alta, por tanto, la invitación a grabarse haciendo la lectura al ritmo que
se prefiera, escuchándose una y otra vez, tratando de descubrir nuevos
sentidos, añadiéndole ese “color” de disfrute, de tal manera que no se haga de
la lectura un sentido monótono y pasivo.
Por otra parte, he insistido en retomar el hábito de la
libreta de dibujo y una herramienta de representación tal como el lápiz, el
bolígrafo o las plumas con tinta de gel; de tal manera que recobrar el hábito
de una libreta personal que consignara frases, bocetos, breves textos y
gráficas que pudieran ser captadas en instantáneas fotográficas e incorporadas
de forma complementaria a los contenidos de análisis, con esto, recuperar el
ejercicio de la pluma en modalidad gráfica o escrita, y si se pudiera añadir
color, ¡mejor!
La libreta no podría ser sustituida por la tableta
electrónica, en razón de que las aplicaciones y accesorios disponibles para tal
fin, aún no se han popularizado por estos lugares, debido ello a su costo y
especificaciones de tabletas electrónicas accesibles a los aprendientes. Así
que a la consigna de “usted nos hace cargar más cosas”, no me quedó más que
agregar, “el teléfono es para conectarnos con el mundo, la tableta con el
cerebro, el libro con el autor y la libreta con el corazón”.
Modalidades de textos alternativos para aplicar en el proceso de diseño
Considerando que la narración consiste en contar hechos
durante un periodo determinado, el uso de metáforas asociadas a imágenes
constituirían un primer enlace entre la arquitectura y la literatura, y así, en
la fase preliminar de diseño, identificar nuevos enfoques y maneras de abordar
el proyecto; desde un sentido analítico, sería posible encontrar posibles
elementos que enriquecieran al objeto de estudio.
La descripción consiste en la redacción que pone especial
énfasis en el detallismo de los elementos, de manera tal que esta modalidad
habrá de ser útil en cuanto elaboración de memorias, diagnósticos y textos en
torno al proyecto arquitectónico. Este ejercicio podría resultar monótono en
tanto provocar cierta insensibilidad al tratarse de un texto técnico para estos
fines.
Así que bajo estas dos modalidades, la narración y la
redacción, podrían ubicarse en las fases anteriores y posteriores al proyecto,
esto es, la narración como apoyo del proceso de diseño, y la redacción como
herramienta descriptiva y de diagnóstico.
Ahora bien, en cuanto a formas de expresión escrita, se
contemplan la exposición, la argumentación, el diálogo y la forma epistolar
(Sánchez citado por Monroy, 2013: 4), estos recursos se contemplan incorporados
en el proceso del proyecto arquitectónico y urbano. Para la exposición se incorporarían recursos
multimedia a fin de enriquecer el marco contextual del proyecto, por tanto,
útil en la fase diagnóstica y de recopilación de información. En el caso de la argumentación, se hablaría de
una defensa de ideas o ejes rectores del proyecto, es interesante porque en una
interlocución podrían ampliar las opciones en la fase de diseño. Posteriormente,
el diálogo como interlocución que mostrara la evolución del concepto
arquitectónico hasta llegar al proyecto, por tanto, emprender un proceso de
metacognición y reportarlo.
Finalmente, la forma epistolar en cuanto considerar dos
voces, tanto del remitente a manera del autor del proyecto, y la segunda como
un destinatario a manera de depositario. Esta fase sería de utilidad en la
retroalimentación del proyecto antes del proceso de gestión, donde quizás,
fuera necesaria la reformulación del mismo, si se piensa en esta fase como
riesgo para echar por tierra todo un trabajo de proyecto, hay que reflexionar
lo que sucede cuando la voz del destinatario de nuestros proyectos, en este
caso, la sociedad, no llega a ser escuchada.
De estos recursos a aplicar, será interesante observar su
aplicación, desarrollo y sobre todo, aceptación o rechazo. No son estrategias
definitivas, considero estar aún en la búsqueda, no hay fórmulas mágicas, pero
sí algunos recursos para tratar de conectarnos, ello para encontrar sentidos y
hacer que el hábito de la lectura y la escritura tengan cabida en la existencia
de las nuevas generaciones; por esto y más es que me atrevo a afirmar que,
finalmente, ‘arquitectura’ puede rimar con ‘lectoescritura’.
Heidi Monroy
Facultad de Arquitectura de Poza Rica, Ver.
Universidad Veracruzana
- Monroy Carranza, Heidi Lizbeth. 2013. Textos alternativos para estudiantes de arquitectura. Texto multimodal. Trabajo final para el curso Lectura crítica y escritura argumentativa. 5 de julio de 2013.
DÍA 4: Pausa para la Reflexión y Autoevaluación [PRA-4]
Fue un extenuante día redactando ante la computadora con reportes y apuntes.
Decidí relajarme a eso de las 19:00 horas frente a un café, tomé un bolígrafo suave en color azul y procedí a escribir de puño y letra el siguiente texto a manera de divertimento:
Decidí relajarme a eso de las 19:00 horas frente a un café, tomé un bolígrafo suave en color azul y procedí a escribir de puño y letra el siguiente texto a manera de divertimento:
Tardo
Si bien mi día laboral inicia a las 8:30 am, lo cierto es que mi despertador suena estridente a las 5:30 como un disparo de salida en franca y veloz carrera para ganar el baño. ¡Ah! Pero el protocolo no es simple: Doblar toda la ropa en el orden debido para que saliendo de la ducha, ni una huella mojada deba advertirse más allá de la cortina.
Así que un bote de plástico contiene lo necesario, desde la primera hasta la última prenda de vestir, no debe faltar una sola, so pena de lamentables atrasos.
Una vez que el bote está listo - incluyendo demás enseres como jabón, champú, crema, posible cortauñas y al final, la toalla - entonces se puede proceder a lo que sigue, que es el orden de la recámara. A ver, camas tendidas, zapatos guardados, ropa sucia doblada y separada. ¿Listo? ¡A emprender la marcha hacia el baño! Estando adentro, el protocolo de desvestirse en el orden adecuado, hasta quedar en una ordenada pila a un lado del bote. De ahí, ¡agua fría!
¿Por sufrimiento?
No, por compensar las más de 14 horas diarias al grillete de la silla de oficina y activar así, la circulación de sangre en el cuerpo; pero, ¡no hay mucho tiempo para reflexionar! Pues seguramente algún miembro familiar ya estará lamentando su atraso al otro lado de la puerta...
... aunque...
... debo confesar...
... que...
... en ocasiones me toca estar ahí: azorada, tocando de manera redundante y esperar un "¡ocupado!".
Cuando se está así, no hay más opción que entrar a un baño que nadie quiere, y el cual, por cierto, nadie se molesta por arreglar, pues quien lo haga, cargará con la empresa equivalente a la cuarta parte del costo de una casa de interés social. Entre quitar azulejos, adquirir nuevos muebles, rellenar, cambiar tuberías, compensar afectaciones, modificar todas las instalaciones y demás, hemos optado por adjudicarle un ignominioso papel: El del castigo por no ganar a tiempo uno de los baños decorosos.
Hoy fue un día así, me tocó el baño ignominioso, abrí la puerta ligeramente desnivelada, pues sonó al tiempo que la empujaba y me recibía una nube invisible cargada de olor a cigarro. ¡Un anónimo miembro de la familia fuma en secreto!
Salí y volví con una vela aromática encendida, la cual, guió mis pasos en esa mañana aún más oscura, pues para mi sorpresa, la instalación eléctrica ya no funciona ni con focos nuevos. Entre lo que respiraba, había algo más desagradable, un insoportable árbitro que parecía mediar entre el cigarro y la vainilla.
Repulsión contra los minutos adversos que transcurrían sin consideración a mi asqueada reacción.
De inmediato abrí la llave de la ducha, tal vez proporcional a la repulsión fue la velocidad de mis diarios protocolos, en silencio y a oscuras. Sólo el chorro de agua a partir del giro de una perilla oxidada a punto de desprenderse.
"Nada más eso faltaría"
Mi mano trayendo uno a uno, cada paso del servicio del bote adyacente, sucesivamente, y así, los bencenos unidos vencieron a ese vaho fulminante que hacía reprimir arcadas.
El matiz de las sombras comenzó a dar paso al alba, la carrera ahora contra el amanecer, para no ver el inferido entorno del abandono. Húmeda y con frío, abrí la cortina y a contraley la toalla, cada una de las prendas hasta salir con la pila de la indumentaria anterior en el orden dispuesto. Respiro aliviada al cerrar la chirriante puerta.
Superé la prueba de la tardanza. Escucho que finaliza la sesión del aseo en los baños restantes. En unos minutos todos nos reuniremos en la cocina como si nada, porque nadie sabe a quién le toca ese día el baño de la ignominia. Todos impecables y acicalados oliendo a perfume, un periódico por ahí, tabletas electrónicas, agendas y las noticias matutinas a todo volumen.
Sirviéndome mi taza de café, pienso, <<"¿remodelar ese baño? ¡para nada! Mejor pongo mi despertador a las cinco...">>
***
miércoles, 29 de enero de 2014
DÍA 3: Pausa para la Reflexión y Autoevaluación [PRA-3]
Indudablemente, una extenuante jornada. Llegamos temprano, nos dividimos las tareas, un pendiente tras otro y fue saliendo todo. Sobre la marcha llegamos a acuerdos, plazos y compromisos. Cualquier procedimiento institucional no sale sin el trabajo conjunto y en equipo. Me siento orgullosa de pertenecer a dos equipos que parecieran ser uno, antípodas de la misma ciudad pero en espíritu esencial y colaborativo.
Por mis manos pasaron un sinfín de imágenes, y sin embargo, ninguna se capturó entre mis dedos para tratar de retratar simbólicamente lo que hicimos.
Por mis manos pasaron un sinfín de imágenes, y sin embargo, ninguna se capturó entre mis dedos para tratar de retratar simbólicamente lo que hicimos.
martes, 28 de enero de 2014
DÍA 2 - ACTIVIDAD: Carta de exposición de motivos
MI CARTA DE EXPOSICIÓN DE MOTIVOS
Deseo ser profesora de Lectura y Redacción en el Área de Formación Básica General porque he tenido la oportunidad de escribir y lo he disfrutado, por lo cual, espero aplicar las técnicas aprendidas durante el curso en los procesos de enseñanza con los aprendientes; asimismo, deseo hacerlo para coadyuvar y fomentar una cultura lectoescritora en los aprendientes, sobre todo en disciplinas creativas donde tendemos a desarrollar habilidades visuales, de tal manera que mi aportación en el desarrollo de quien se está formando, sirva para incentivar nuevas búsquedas. En razón de que se ha presentado la oportunidad, deseo explorar opciones novedosas para el enriquecimiento de los contenidos de las experiencias educativas, y así, incentivar la lectura de textos (tales como ensayos, ponencias y textos teóricos) sin provocar aburrimiento o indiferencia.
Heidi Lizbeth Monroy Carranza
DÍA 2: Pausa para la Reflexión y Autoevaluación [PRA-2]
Antaño el silbato de PEMEX marcaba los ritmos y rituales del
pozarricense, ahora, en un bullicio que reverbera entre pavimentos, se pierde
hasta integrarse a los sonidos del mediodía, entre alarmas, llamadas de
celular, automóviles, transporte público y radios con voces sin interlocutor.
Pensaba ello al caminar presurosa con mi celular entre las manos. Caminé aprisa
con el celular y una unidad USB. Aprovecharía la pausa para entrevistarme con
un colega quien me facilitaría información para un reporte, pero casualmente,
se encontraba en el Palacio Municipal, no muy lejos de la USBI.
Seguí las indicaciones esperando que mi plan funcionara, el
de grabar los archivos rápidamente, regresar y degustar un café con el
aliciente de la plática con los compañeros del curso. Esperanzada, apresuré más
el paso. Despejada la acera frente a la primaria, a la vuelta, también despejado.
¡Perfecto! Llegué sin problemas, todo iba bien, hasta que se empezaron a grabar
los archivos a una velocidad tan lenta, que dio tiempo de platicar sobre los
eventos culturales de la Facultad de Arquitectura, del curso de Lectura y
Redacción, de mi compromiso de mostrarles mis textos en cuanto hubiera
oportunidad, también de la ropa de la década de 1970 (a propósito de mi
abrigador saco), de la época de Franco en España, de cómo un profesor tuvo
oportunidad de viajar en ese entonces y constatar el efecto peligroso de que un
hombre ebrio comenzara a recitar a García Lorca.
Entró un amigo a quien hacía años no veía. Después,
entró una amiga de mi mamá, y la barra azulada que indicaba el avance se movía
lentamente, comencé a desesperarme, en eso, entró una coordinadora de hoteles, cuya
jovialidad y simpatía, amén de la confianza breve y afortunada, se prestó a
pícaro juego de palabras ‘hotel-motel’, si bien en cuestiones de espacios,
modalidades y anécdotas llevan la delantera los honorables taxistas, colegas
arquitectos pueden dar cuenta de otras cosas, sobre todo en cuanto a las exigencias
de los empresarios que, hoy en día, rayan entre la curiosidad y la
extravagancia.
Fue increíble la temática tan pródiga en contraste a un
espacio, un rincón donde usurpé el lugar de mi atento anfitrión, pues uno de
los dos se sentaba a falta de sillas, pero sobre todo, de espacio. La
secretaría iba y venía. Papeles, carpetas, clips, los ingredientes de toda
cultura de oficina. Me desesperaba la franja azul que no parecía avanzar, dudé de haber asistido en lugar de haberme quedado en la sede, pero, ¿había otra opción?. Después de otras charlas relacionadas
con itinerarios, finalizó la carga de archivos, agradecí las atenciones.
La caminata de retorno la sentí breve… y sin embargo, tardé.
No degusté café, no platiqué con mis compañeros. Al ver mi memoria USB con
letras deslavadas, parecía decirme “lo siento”. Así fueron estas batallas con
el enemigo difuso del tiempo y la circunstancia.
DÍA 2: Texto paralelo de Andamiaje [TPA-2] (Estenográfica del 28 de enero de 2014)
(SE EMPRENDIÓ LA LECTURA DE LOS DIARIOS POR PARTE DE LOS
COMPAÑEROS)
RUBÉN HERNÁNDEZ: ¿De qué nos damos cuenta?
-
Observarnos
-
Autoobservarnos
-
Dejar observarnos
Es decir, observo, el otro también me observa. Déjense
observar. Se van a dar cuenta de muchas cosas. ¿De qué se dan cuenta?
LUCILA PÉREZ: Me doy cuenta, como buen comunicólogo, haces
uso de tu habilidad, tu narrativa me agrada, está plasmada de sentimientos pero
también una chispa de espontaneidad. Me doy cuenta de que en tu descripción
haces mención de dos personas, cuando se presentaron, ignoro, no pregunto,
impactante el hecho de lo que marcó Heidi ayer en ti. Espero no sea la primera
ni la última vez. Lo que me perdí, lo pude rescatar a través de ti.
RUBÉN HERNÁNDEZ: ¿De qué se dieron cuenta de lo que dijo
Luis de lo que dijo Lucy?
IDALIA LUCERO: Bueno, tal vez retomando lo que dijo la
compañera, gracias a la descripción que hace mi compañero, ella puede revivir o
darse una idea de qué fue lo que sucedió en su ausencia, viene a retomar parte
del día de ayer, si se hace una buena descripción, podríamos volver a estar en
el momento, y que gracias a la lectura, podemos revivir ese momento.
RUBÉN HERNÁNDEZ: ¿De qué se dan cuenta? ¿Crees Fanny con lo
que leyó Luis, lo que dijo Lucy, lo que dijo Idalia?
FANY CÁRCAMO: No pude asistir el día de ayer, pero ya tengo una
idea más completa de lo que sucedió ayer, cómo fue iniciando el curso, y bueno,
con la descripción de mi compañera es más que completa, hasta me dio una idea
de lo que tengo que hacer en las actividades. La dinámica de ayer, no sé bien
cuál fue el material que utilizaron, sí me doy cuenta de la dinámica del curso,
y que el ejercicio en el que estamos, requiere de la concentración en la
palabra del otro.
SOFÍA NOCHEBUENA: Observo de manera particular, que nos hace
ver cómo llega a este curso y cómo se introduce, falta ver qué estamos haciendo
desde su perspectiva; de los alumnos, conocemos una parte, falta integrar la
historia completa.
LUCILA PÉREZ: Me sigo dando cuenta sin afán de juzgar,
esperaría los demás diarios de vida y aprendizaje, solamente Luis narró una
pequeña parte, para él fue muy significativa, dejó elementos importantes, la
didáctica después del receso, solamente las compañeras que se están integrando,
tienen una pequeña parte de la información de ayer.
LUIS NAVARRO: Quiero retomar lo que dijo Sofía, en realidad,
no se compone de una sola historia, son diversas, la realidad se construye a
partir de diversas historias, tengo ganas de que los demás cuenten.
RUBÉN HERNÁNDEZ: ¿Por qué... los demás no levantaban la mano?
¿Quién quiere leer su diario?
LAURA GAYOSSO: 7:30 de la mañana, para el curso de lectura y
redacción, saco lápices, sacapuntas, hojas, tengo muchas expectativas, aparte
de la oportunidad de dar clases, aprender algo sobre la lectura, llego puntual
y ayudo al técnico a arreglar las salas, a algunos los conozco, a otros no. La
coordinadora Mireya da plumones y post-it, el maestro se ve agradable y con
conocimiento del tema, es observador, nos induce a participar, ver cómo se
desenvuelve. El ambiente de aprendizaje, se hace con confianza para
preguntar lo que vayamos sintiendo, me
gusta el curso, quiero participar, encarga una tarea, pero espero, prefiero
asimilar. Ahora ya estoy lista, la primera es fácil, lo cotidiano del internet,
me tocó con dos compañeras, la segunda lectura es más difícil, hago pausa, creo
que lo logro, tengo plena seguridad de explicar. No quiero que termine la
sesión, se siente el ambiente de apoyo y cooperación. Nos dan la tarea de ver
una película, además de realizar este DVA, me voy agradecida con la oportunidad
de esperar al día de mañana para continuar. No he conseguido la película.
Después de haber dormido a mi pequeño hijo y haber atendido a mi esposo. Veo
los archivos de la carpeta de DVA, con ello procedo a redactar mi primer borrador,
mis ideas fluyen y no paro de escribir. Después de hacerlo a lápiz, procedo a
pasar a la computadora. Y al finalizar, puedo leerlo. Así es como lo entregaré.
RUBÉN HERNÁNDEZ: Claudia, con lo que leyó Luis, Lucy,
Idalia, Laura... ¿De qué te das cuenta?
CLAUDIA GONZÁLEZ: Tenemos que participar mucho, leer
bastante, no tengo mucho conocimiento sobre el tema, y hay que compartir ideas
que cada uno de los compañeros trae.
RUBÉN HERNÁNDEZ: Nos damos cuenta de muchas cosas, unas se
escriben, otras se escuchan. Voy a contarles una anécdota. Trabajé en una
universidad privada hace 15 años, y la Vicerrectora nos pedía que publicáramos,
pues se creó una revista al interior de la facultad; un compañero coordinaba la
carrera de comunicación, escribía artículos como si fuera una línea de producción
de alguna compañía, nos decía la Vicerrectora, "aprendan de él". Sí,
pero ésa es su profesión, y en cambio, desde la contaduría, desde otras
ciencias no poseemos esa fluidez. Y recuerdo algo que les dije ayer, lo dijo la
Vicerrectora, “¿y les gustaría escribir como él? Pues empiecen, quiero ver aquí
un artículo de ustedes”. Escribí algo sobre "pensar por ustedes".
"Pensar con los dedos". Ya cuando pasó a la editorial, quisieron
cambiarle el título, algo así como ‘computadora, extensión del hombre’, el
original decía "Pensar con los dedos". Lo que hace Luis, es de
admirarse y de reflexionarse si queremos hacerlo. Vean cómo le va agregando
adjetivos calificativos. Puso el ‘puente interminable’, ¿se van dando cuenta?,
la rosa es roja y es bella y huele rico, y más, y más, y más...
Lucy dice que le faltó carácter didáctico, alguien se da cuenta
de algo de lo que no se da cuenta, me llama la atención, Lucy se dirige
directamente a ti, está retroalimentando tu trabajo, Luis "¡pas!", aquí
voy a comentar una cuestión que estoy trabajando, "¿qué veo yo que Luis
aún no ve y desde la perspectiva y experiencia de Lucy ella ve como algo probablemente
favorable para que tú también veas? Pero seguramente, hay algo en ti, en tu
texto, que ella aún no había visto, pero que al escucharte, ¡descubre!
Déjate observar, no pasa nada, "yo quiero leer",
como hizo Laura, Idalia o Claudia, se atrevieron. Déjate observar, ésta es otra
anécdota, y digo apariencia. Entonces un día el gerente de un astillero en
Mazatlán, tenía un curso para mí, era un curso de Carnegie, "cómo hablar
en público", hay que perder el miedo a vivir. Y efectivamente, pierde uno
el miedo a vivir.
Con esto, necesitamos atrevernos a mostrarnos, no a abrirnos
la camisa, sino hasta donde ustedes quieran, ¿quiénes son?, ¿de dónde surgen
las ideas?, el diario es personal, por eso pregunto, ¿quién quiere leerlo? Más
que el contenido, ver la forma, por ahí puse unas notas, es un propósito para
mostrarlo.
(SE ABRIÓ LA PLATAFORMA DE EMINUS)
RUBÉN HERNÁNDEZ: Por ejemplo, aquí, notas amarillas y
azules.
--- (PARTICIPACIÓN PERSONAL: SIN REGISTRO) ---
RUBÉN HERNÁNDEZ: Te diría, ese término déjalo afuera,
simplemente estás escribiendo, y en la segunda vuelta, apareció algo en lo que hay
que mejorar. Estás en rediseño de tu texto, una reescritura, estaba casi bien.
JESÚS MARTELL: Con la participación de Laura e Idalia, con
Luis, la importancia de la oralidad, en nuestros ámbitos olvidamos leer y
escribir, muchas veces, como dice la compañera, a leer en voz alta, incluso en
quienes nos iniciamos en lectura y redacción, es recomendable leer en voz alta.
RUBÉN HERNÁNDEZ: Retomaría el proceso didáctico de cómo
estamos aprendiendo, mi intencionalidad, escucharlos, leerlos en voz alta, te
pongo taches, darte cuenta de que hay algo. ¿Qué? A eso me refiero con recursivo,
volver a leer, retomo lo que decía ayer, cuando sientas que está lista, la
mandas, entonces, así como decía Luis, me quedé dormido antes de terminar, en
la prisa, ¡pum! envío, la vuelves a leer. Requiere flexibilidad del profesor,
lo envías a las 11:59 hrs. ya estoy limitando tu aprendizaje.
LUIS NAVARRO: Quería hablar de eso, no decir
"revisar" sino "volver a leer" y como dice el compañero,
"leer en voz alta", y lo otro, es un error de dedo. Pensé cuando lo
leí, "se va a poner interesante", son errores de dedo, así que hay
que volver a leer, ir al texto de vuelta.
RUBÉN HERNÁNDEZ: Como profesor, pude decir "tienes
8", hay que corregir, ¿qué espero de Idalia? Parece que hay algo que tengo
que revisar, el segundo paso, que lo hagas, vas a aprender haciendo, dándote
cuenta, con una pequeña ayuda de tus compañeros.
--- (PARTICIPACIÓN PERSONAL: SIN REGISTRO) ---
RUBÉN HERNÁNDEZ: ¿De qué se dan cuenta?
NIMBE VARGAS: Me gustan los dibujitos, el estilo de
aprendizaje de Heidi es visual, me gusta aprender así, parecido a los jóvenes,
trae letras sin nada de muñequitos. Así como lo siente.
RUBÉN HERNÁNDEZ: Es la idea de papel y lápiz.
SOFÍA: Es una habilidad que ha adquirido, tiempo y esfuerzo,
he observado, nos ve y escribe, es una habilidad me gusta mucho.
RUBÉN HERNÁNDEZ: Aquí, no tan sólo agrega algo del texto,
derivado del cuaderno, sino además, una fotografía, y preguntas que yo haría
por curiosidad. ¿Quién quiere comentar
la película?
NIMBE VARGAS: Trata de amor y pasión de las personas, es una
película no creería que pasó lo que pasó, se trata de dos enamorados jóvenes, se
embarazan, lo dan en adopción; ellos son músicos, así que está la pasión. El
chico está en un orfanato tiempo después, y se va de ahí, se escapa, pero trae
esta pasión por la música, es increíble, no es una música normal. Sino una
música diferente, lo que le hace tener diferentes aventuras, lo estaba buscando
y va haciendo las pistas, de dónde puede estar el muchacho, y la gente está a
punto de desencadenar una serie de casualidades. En un concierto con una
acústica muy buena, se junta con otras personas, y bueno, esta corazonada de
madre luz sobre dónde puede estar su hijo. Empiezan a buscarse, se encuentran
los tres, está muy bien musicalizada, muy bien las actuaciones, me hace creer
en el amor y las casualidades.
RUBÉN HERNÁNDEZ: ¿Alguien más?
MERCEDES GARCÍA: Aparte de lo que dijo mi compañera Nimbe,
es una búsqueda intensa del niño, lo extraordinario es que el niño no tenía
nociones de la música, ahí la genética tiene mucho que ver, al papá le gustaba
la música, la música, conciertos, lo que veo en relación a la materia, es que
como decía el compañero Martell, dejarnos fluir, él encuentra sonido a todo,
como musical. El niño se deja fluir al inicio, así que hay que dejarnos fluir
para no limitarnos al escribir, aparte, la música es cultura como aprender a
leer y escribir, leer literatura, libros que nos dejen algo valioso y que
impacten en el alumno.
SOFÍA NOCHEBUENA: Logré ver la película por partes. Busqué
entre mis películas viejas, la puse, pero iba haciendo pausas, la fui viendo
por pedacitos, voy a entrelazar lo que recuerdo, mientras la veía, saqué unos puntos.
Deja ver la vida a través de la música.
Cómo luchar por un sueño.
Conexión de todo con los seres humanos.
Disfruté el episodio donde Luis tiene un encuentro casual en
el parque. Pese a no conocerse, tiene una comunicación especial y única, no
evité disfrutar la música, como tenía los audífonos, sentí cómo la música podía
transmitir, sentí coraje cuando separa a su hija del amor de su vida, le quita
a su hijo; cómo la carga genética, en este caso el niño, venían de padres
artistas. Identifico tres personajes, hijo, mamá y papá, 3 historias distintas
para fusionarse en una sola. Tres clases socioeconómicas diferentes. Muestra el
detalle de cómo la vida da muchos giros, aunque a veces los aleja, los llega a
unir, logra su objetivo principal que es unirlos, deja huella en mí, denota
momentos que conectan el interior, me doy cuenta que estamos conectados
interiormente, cuando nos damos cuenta de eso, podemos hacer nuestros sueños
realidad, escenas de violencia, religión, en momentos hay música que te lleva a
la divinidad.
MERCEDES DÍAZ: Lo ve… se trata del destino.
LUIS NAVARRO: Dice lo que las compañeras lo han dicho, la
música, percibida por muchas partes, puede suceder con nosotros si así nos lo
proponemos, con esa capacidad de asombro, con lo que sentimos, rescato de esta
película, vivir la vida con esos ojos, piel y oídos de niño para crear, crecer,
sentir, esto es fundamental, cuando uno quiere aprender, es la principal
condición, estar dispuesto, poner todos los sentidos en lo que es la vida
cotidiana. Más allá de la genética, finalmente, se puede tener una carga
genética impactante, pero está dispuesto a compartir, sentir, es muy sensible,
me recuerda a "El perfume". Es muy sensible. Me gusta mucho, la
protagonista muy guapa.
ESTEFANNY GÓMEZ: De Sofi me doy cuenta en su relato, mezcla,
describe de qué se trató la trama, pero hace énfasis en los sentimientos que va
desenvolviendo en ella, en cuanto al compañero Luis, es muy cierto, coincido
mucho, como la de "El perfume", la película que vimos, el niño
desarrolla su potencial. Es saber escuchar, desarrolla su habilidad en la
música, cada uno de nosotros podemos desarrollarnos, pero debemos encontrar
alguna y exprimirla.
SOFÍA NOCHEBUENA: Para finalizar, nos enseña a disfrutar lo
que se hace, al escribir, nosotros disfrutemos, y dejemos fluir, conectar
pensamiento con sentir, pueda fluir. Sea a través de imágenes o la palabra
escrita.
RUBÉN HERNÁNDEZ: Voy a simular a la chica bonita,
imagínensela sentada con su cello y tocando, pero al mismo tiempo a su hijo en
su vientre, ¿qué está recibiendo? Las vibraciones, esa carga genética es
aprendida, no es que, lo aprendió en algún momento, escuchando a su madre. El
padre, era rockero y tocaba bonito, pero ¿cómo influye en el niño? Muy bien,
voy a simular la escena del inicio. Con plantas. Entonces viene el aire, y
mueve el trigal, el niño respira y se mueve junto con él, gira y empieza a
darse cuenta de la naturaleza, entra en armonía y descubre que la naturaleza
tiene sonidos, y con esos sonidos se acuerda de su mamá, la asocia, vibra,
entra en frecuencia, es la sensación que le hace buscar a sus padres. Él cree
que sus padres lo escuchan tal y como escuchaba a su madre. Tiene que ver con
lectura y redacción esa conexión con la naturaleza, esa sensación de disfrutar
de lo que estoy escuchando, hay un momento, un chico toca una guitarra sin
haber tomado clases.
Hay una conexión, tal vez como la que empezamos a sentir
ayer cuando leíamos a varios autores. Hay una escena cuando llega a una iglesia
y está tocando. Y le explica, le enseña la relación entre el piano y la
partitura; cuando lo descubre el niño, todo lo quiere escribir en lenguaje
musical. Lanza el balón a la canasta, pega y se mueve, y todo eso. Cómo van
describiendo lo que van viviendo, entonces, para cerrar esta actividad, la
sensibilidad humana se puede transformar en un texto. Por eso me gusta
asociarlo, hay un contexto y un pretexto para aprender el texto. Para aprender
y desarrollar. Quien no haya visto la película, disfrútenla. Sobre todo esa
parte, el mundo está hecho de palabras.
Con muy pocas palabras, podremos hacer melodías agradables.
¿Qué preguntas tienen?
CLAUDIA GONZÁLEZ: Cuando la Mtra. Nimbe la adelantaba,
recordé que la había visto, me percaté de que los compañeros no comentaron que
el niño estuvo dentro de su mamá, ahí fue donde el chico iba escuchando durante
ese tiempo de embarazo de la mamá. El papá se lo quitó a su hijo, porque su
pareja no era apta. Ella estaba en un momento exitoso de su carrera, por eso se
lo quitó. Dando usted las ideas que mencionó, la película de eso trata, de
sensibilizar.
RUBÉN HERNÁNDEZ: El estado de ánimo condiciona el
aprendizaje.
ALBA GONZÁLEZ: ¿Puedo ordenar lo que siento? Cuando me pongo
a escuchar, de esa manera se puede compartir el aprendizaje, y a la vez
enriquecerlo con cada uno de los pensamientos.
RUBÉN HERNÁNDEZ: Preposiciones.
(LECTURA EN GRUPO)
TEXTO. Vaso de agua. Un kilo de carne, ¿la medida de su
peso? "un kilo con carne". Libro de dibujos.
RUBÉN HERNÁNDEZ: Se trata de crear sus propios documentos.
Estrategias y técnicas de escritura, a partir del diario y del ejemplo de la
película... hay una estrategia. No sé qué escribir, hay mucho género de dónde
tomar.
Escribir, ¿para qué? Para sentir, informar, registrar,
expresar, dar cuenta, persuadir, dar cuenta, convencer, contratar, comprar,
crear. Allá en 1979, en una compra de materiales para adquirir buques, tenía
que hacer una requisición, por ejemplo, ‘tubería galvanizada de diámetro de media
pulgada’, pero había que mandar la información en un oficio, entonces llegó mi
jefe, él lo firmaba, me dijo "aquí está mal". Ah, error de la
secretaria, me dijo "¡no!, tú eres el editor, es tu responsabilidad
escribir bien". Me puse rojo, verde, amarillo, de todos los colores, que
me compro un Larousse… y se lo regalo a mi secretaria, y por supuesto, agregué
uno a mi escritorio. El siguiente reto, con el jefe de la planta, el director
general, lo que hice fue decir “oye, préstame algunos oficios para ver cómo le
gusta redactar”, mi gran satisfacción era pasar el documento. Esto lo asociaba
a microéxitos, pequeñas situaciones que me permiten ver cómo iba avanzando. No
se trata de aprender sólo de memoria, sino encontrar la información para
consultar. ¿Qué estrategias tienen ustedes para escribir?
ALBA GONZÁLEZ: Como una especie de mapa conceptual, si me
interesa, construyo a partir de palabras clave, sobre todo con flechas, para
crear mapas y después muy rápida, no importando si tengo buena o mala
ortografía, y después depurar.
LUIS NAVARRO: Para narrativa empiezo por la idea final y
después voy desarrollando las etapas. En narración oral vamos construyendo el
cuento, en el caso del periodismo, lo que hago para la crónica retomo esto de
la crónica, lo que pasó y a llenarle en medio lo que está. En el caso concreto
de la noticia, en lo particular, encuentro un verbo pongo como ejemplo,
"El presidente municipal anuncia que se va a construir un puente",
rompo la sintaxis, "anunció", trato de tener la primera frase y la
última, después voy acomodando lo que está en medio.
RUBÉN HERNÁNDEZ: ¿Cómo escriben? ¿Qué hacen?
JESÚS MARTELL: Lluvia de oraciones, de ahí voy seleccionando
las ideas, voy jerarquizando, voy desarrollando las ideas secundarias. Y
posiblemente, veo si de esas jerarquizaciones se puede desarrollar si de las
oraciones que escribí es el título.
LAURA GAYOSSO: Pienso en el tema, fluyo escribiendo, lo leo,
jerarquizo y quito lo que no es esencial, reescribo y vuelvo a leer.
SOFÍA NOCHEBUENA: Leo, consulto al menos 5 artículos,
rescato, por puntos y posteriormente me siento. Si algo me gustó, lo retomo.
Después no encuentro tal vez secuencia y lo corrijo.
LUCILA PÉREZ: Igual que Martell, saco los puntos
principales, recuerdo no mucho tiempo, me fui becada por parte de Conacyt en
Guadalajara a una estancia con una investigadora, ella tenía una secretaria,
tenía hojas, pegamento y hojas. Me preguntaba “bueno, ¿qué harán?”. Ella se
agarraba a escribir, después tenía otra estrategia, a ella le funcionaba, hacer
cortes, imprimía o escribía, o hacía cortes, pero la secretaría ya sabía.
Pegaba el rompecabezas. A pesar de que hay un orden. Me llevo a pensar, a mí me
ha funcionado las ideas principales, cuando estuvimos en un curso con Ricardo
Bennet, el primer paso principal que va a hacer una película, un documental,
pensar en una historia, significa dejarse fluir. Una narrativa, una noticia.
Esto me lleva a darme cuenta. Cómo cada quien usa diferentes estrategias.
Decían, sentires, emociones, estados de ánimo y demás.
RUBÉN HERNÁNDEZ: ¿Alguien más? ¿De qué se dan cuenta? Veamos
la diferencia entre estrategia y técnica.
RUBÉN HERNÁNDEZ: A ambos lados, ambos hemisferios del
cerebro, el izquierdo el que piensa, el derecho el que siente. Tratando de
buscar un pensamiento unificado.
RUBÉN HERNÁNDEZ: Idalia mencionaba de una persona que no
sabía qué escribir hasta que escribió su propia historia.
RUBÉN HERNÁNDEZ: ¿Cuál es la mejor estrategia para escribir?
Tener sueños.
Contar historias.
Reunir emociones.
Sentimientos.
Retomando la película, el mundo está hecho de palabras,
palabras escritas. Puedo escribir sin saber gramática o partitura, sin saber
diferenciar si es verbo, pero necesitamos leer y compartir. Notas musicales, es
importante hacerlo, guías, manuales, que refresquen lo que primaria, secundaria
y bachillerato hemos estado aprendiendo.
Tarea:
- Observar
- Autoobservarse
- Dejarse observar
Técnica:
- Objeto central, 5 palabras, y de ada palabra, 5 conceptos. De ahí, generar oraciones.
LUCILA PÉREZ: Utilizando tu técnica y aplicarla en
estrategia, una vez que tuviera todo su mapa conceptual, ordena tus ideas y
elabora tu cuartilla. Ideas. Una aportación a la estrategia.
RUBÉN HERNÁNDEZ: ¿Qué más a partir de eso? Párrafo -->
Cuartilla --> Texto
Color, forma...
edudist.uv.mx/eminus/cursos/GXCRNM/GXCRNMO44/GXCERNMO44X79/_4ct1v1d4d_GXCRNMO44X7901/index.html
Escribe, narra, expone y argumenta lo que hiciste al momento
de ejecutar la técnica. Si se van narrando los eventos en el tiempo. ¿Cómo
expondrían?
MERCEDES DÍAZ: Al exponer cada quien leyó lo que escribió.
RUBÉN HERNÁNDEZ: Si yo quiero describir, podría empezar
diciendo, "la técnica consiste en... dibujar un círculo y... ". Si
quiero narrar... estás contando lo que pasó, ¿qué pasó? El profesor a partir
del concepto de manzana nos hizo reflexionar, narrar... ¿Cómo podría exponer?
LUCILA PÉREZ: Te la explico, la evidencío...
RUBÉN HERNÁNDEZ: De manera escrita. Me parece que la palabra
exposición la asociaciones a una exposición. ¿Cómo expones lo escrito? A partir
de la definición de Serafini, ¿cómo exponemos la técnica que acabamos de
realizar?
NIMBE VARGAS: Sobre la descripción, “hice un ejercicio sobre
escritura, a partir de una palabra, derivar otras cinco..."
RUBÉN HERNÁNDEZ: Voy a exponer un tema, no los veo, necesito
escribir mi exposición, expongo la técnica de la manzana. "La técnica consiste en... “(sin apego,
sin juzgar). La rosa es roja, si dices bella, le estás dando adjetivo. Entre
describir y narrar.
JESÚS MARTELL: La descripción en el objeto y en la narración
con la historia, presenta una historia, una serie de sucesos.
RUBÉN HERNÁNDEZ: Mi crítica para Serafini, pone exposición y
argumentación, por eso estamos analizando las diferencias. Otra diferencia, en
qué se parecen o diferencian el ensayo con el artículo. Pero lo vamos a ir
construyendo.
Sobre la exposición, como técnica que sirve para generar
ideas, frases, ordenar el pensamiento. Si digo, ¿por qué crees que esta técnica
ayuda a mejorar las ideas? Por esto, esto y esto... ya estamos ahí
argumentando. ¿Ven esas ideas?
Ahora, vamos a ir a otra lectura.
Describe el mapa.
IDALIA: (Comentarios sobre su ejercicio)
DESCRIPCIÓN.- Se hace un mapa mental, se tomaron 5 palabras,
y de éstas, otras 3. De ahí…
NARRACIÓN.- Primero dibujé una manzana, de ahí, coloqué
cinco palabras, las cuales son fibra, sabor, economía y fruta; ya que tenía
identificada cada una de estas palabras, la siguiente instrucción era colocar
otras tres palabras, como tercer paso, colocar estas palabras, y uno de éstos,
perfume, maestro y religión. Ya que tenía estos segundos conectores, redacté
las frases en las que incluí cada una de estas terceras palabras.
EXPOSICIÓN: Obtuve frases que como comentó el maestro, si
las ordeno, puedo obtener fácilmente una cuartilla, de la redacción en origen
manzana, por ejemplo...
RUBÉN HERNÁNDEZ: Ahí estás exponiendo, "a partir de
esta técnica el resultado que obtuve fue..." ¿Por qué podría ser buena o
importante para que los chicos aprendan a escribir?
IDALIA: Ya he utilizado esta técnica, nos permite ir
aterrizando ideas, a partir de palabras, cuando no sabemos, no tenemos la
certeza, facilidad, de que podamos redactar, por medio de palabras podemos ir
relacionando las frases, y así, ir incrementando nuestra redacción.
RUBÉN HERNÁNDEZ: Dime 3 buenas razones para aplicar esta
técnica con tus estudiantes.
IDALIA LUCERO: Ideal, sencilla y producto. Pueden iniciar y
darse cuenta de que pueden escribir
RUBÉN HERNÁNDEZ: Esto, por esto, por esto, y esto otro. Ahí
está la diferencia, describir, narrar, exponer y argumentar. Se van viendo la
diferencia. ¿Cómo se puede... al momento de leer? Leemos, nos damos cuenta en
qué momento se describe, narra, expone o argumenta.
TAREA 2: De los textos que leyeron el día de ayer, responder
a las siguientes preguntas.
¿Qué momento narra?
¿En qué momento describe?
¿Qué argumenta?
La idea de Luis de asociarlo al Torito, es hacer esa
observación que permite hacer argumentos. "Me parece que... “Ahí se
genera.
Veamos otro texto.
Acabo de hablar, para solicitarle para que nos de esta liga.
Texto PROSAS DE BASE de María Teresa Serafini
Accionar máquinas, Daniel Cassany
Bien, se trata de desarrollar enunciados, lo pone en forma
de preguntas.
Otra estrategia es formular preguntas. ¿De qué estoy
hablando?
Me preocupa si van a terminar la obra anunciada por el
político, ¿qué piensas al respecto?
Especifique sentires y la parte temporal.
Exposición, ¿qué aprendiste?
Argumento, ¿de qué te das cuenta?
Para sacar sus ideas, no tanto lo que quiero escuchar yo,
sino ustedes.
Cassany recomeinda un diario personal, mapas y redes, como
lo que acabamos de hacer, ahí está el mapa,
Pero un informe que tiene diversidad de elementos, imagen,
video... mucho más rápido, ahora se les ha llamado, "texto
multimodal". Diversos modos de exponer algo. Un informe es expositivo,
simplemente informa.
Aquí viene una técnica, consejos para el torbellino de
ideas.
¿Qué?
¿Cómo?
¿Cuál?
A lo de la manzana, agrégale, contextualiza, cuándo, en
dónde, etc...
Hay otra, el cubo,
¿En qué se relaciona la manzana con la dentadura...?
¿con Adán y Eva...?
Aplícalo...
LUCILA PÉREZ: Fue lo que hicimos.
RUBÉN HERNÁNDEZ: Están relacionando las palabras, coloquial,
cotidiano, puede ser poético, claro, lo veo, relaciono, pero mi mente ya está
trabajando; a lo mejor saco algo como decía Neruda, es que el pretexto para
escribir, es un contexto. Por ejemplo, chicos caminando, conviviendo, esa
imagen, ¿qué me dice? Allá hay una aplicación a lo que pareciera ser
indicación, cada vez que vayan por el mundo, observen, y capten imágenes que
les permitan escribir, una oración.
- La cabaña a lo bajo de la montaña.
- Me entristece lo abandonado.
- Ejemplo de zonas de riesgo por deslave.
Invierno. Cambia el contexto, puede cambiar la percepción.
Ahí es un día soleado. NO se logra ver. Ir buscando que el mundo está hecho por
palabras. ¿Cómo se sienten?
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